La Iglesia de St. Walburge en Preston, Lancashire, es una maravilla arquitectónica que refleja la genialidad y creatividad de su diseñador, Joseph Hansom. Esta obra maestra del Renacimiento Gótico, finalizada a mediados del siglo XIX, no solo es un lugar de culto sino también un faro de importancia histórica y cultural. Con su imponente aguja, la más alta de cualquier iglesia parroquial en Inglaterra, St. Walburge es un hito que domina el horizonte e invita a los visitantes a explorar su rica herencia.
La historia de la Iglesia de St. Walburge comienza en la bulliciosa era industrial del siglo XIX, cuando Preston florecía gracias a sus prósperos molinos textiles. La iglesia fue encargada durante el renacimiento católico romano en Inglaterra, una época marcada por un renovado fervor religioso y la construcción de grandiosos edificios eclesiásticos. El arquitecto elegido para este ambicioso proyecto fue Joseph Hansom, también conocido por inventar el cabriolé hansom. La construcción comenzó en mayo de 1850 y la iglesia se inauguró oficialmente el 3 de agosto de 1854.
La iglesia está dedicada a Santa Walburga, una santa inglesa nacida en el año 710 d.C. Era conocida por sus poderes milagrosos de curación y su trabajo misionero en Alemania junto a sus hermanos, San Willibald y San Winibald. La dedicación a Santa Walburga refleja la profunda conexión de la iglesia con las tradiciones e historia de la fe católica.
Uno de los elementos más impresionantes de la Iglesia de St. Walburge es su aguja, que se eleva a una altura impresionante de 94 metros (309 pies). Esto la convierte en la aguja más alta de cualquier iglesia parroquial en Inglaterra y la tercera más alta del Reino Unido, después de las catedrales de Salisbury y Norwich. La aguja está construida con durmientes de piedra caliza que originalmente llevaban el cercano Ferrocarril de Preston y Longridge, dándole un único tinte rojo durante el atardecer. Esta maravilla arquitectónica no solo es un deleite visual, sino también un testimonio del uso innovador de materiales por parte de Joseph Hansom.
El exterior de la iglesia es igualmente cautivador, con su fachada de arenisca roja nueva que presenta una armoniosa mezcla de elementos góticos tradicionales. La fachada está dividida en dos zonas por una fuerte arcada horizontal, equilibrada por contrafuertes salientes y pináculos en las esquinas. La zona superior está dominada por una magnífica ventana rosa de 7 metros (22 pies) de diámetro, que ocupa casi todo el ancho de la nave.
Al entrar en la Iglesia de St. Walburge, los visitantes son recibidos por un interior impresionante que puede albergar a unas 1,000 personas. La iglesia mide 50 metros (165 pies) de largo y 17 metros (55 pies) de ancho, con un techo de madera abierto sostenido por catorce vigas martillo. Cada viga martillo está adornada con figuras talladas a tamaño real de santos, añadiendo un toque de arte divino a la estructura.
La iglesia cuenta con un impresionante órgano de William Hill de Londres, instalado en 1855. Este magnífico instrumento añade a la atmósfera espiritual de la iglesia, llenando el espacio con melodiosos himnos durante los servicios. Otras características notables incluyen un tríptico de madera y un crucifijo con el escudo de Preston y el lema Princeps Pacis (Príncipe de la Paz). La presencia de San Ignacio de Loyola a la derecha del santuario refleja la influencia de los sacerdotes jesuitas en la ciudad, mientras que las representaciones de los santos patronos de Gran Bretaña enriquecen aún más el tapiz espiritual de la iglesia.
En años recientes, la Iglesia de St. Walburge enfrentó la amenaza de cierre debido a restricciones financieras. Sin embargo, la calidad de su arquitectura y su importancia para la comunidad local llevaron a un esfuerzo concertado para preservar este edificio histórico. En 2014, Michael Campbell, el Obispo Católico Romano de Lancaster, confió la iglesia al Instituto de Cristo Rey Sumo Sacerdote. Este movimiento aseguró que la iglesia permaneciera abierta como un santuario para la Devoción Eucarística y la adoración, con Misa diaria y sacramentos ofrecidos en el Rito Romano Tradicional.
La aguja de la iglesia está ocasionalmente abierta al público en las noches de fin de semana, ofreciendo a los visitantes una oportunidad única de ascender esta maravilla arquitectónica. Los fondos recaudados de la venta de boletos contribuyen a la preservación y mantenimiento continuo de la iglesia.
La Iglesia de St. Walburge es más que un lugar de culto; es un faro de herencia, un símbolo del orgullo y la resiliencia de la comunidad católica romana, y un testimonio de la brillantez arquitectónica de Joseph Hansom. Su imponente aguja, intrincado diseño gótico y rica historia la convierten en un destino imprescindible para cualquiera que explore Preston. Ya seas un entusiasta de la historia, un aficionado a la arquitectura o un buscador espiritual, la Iglesia de St. Walburge ofrece una experiencia cautivadora que te dejará asombrado por su grandeza y significado.
¡Compre sus entradas ahora!
¡Con myCityHunt descubre miles de ciudades de todo el mundo en emocionantes gymkanas, búsquedas del tesoro y juegos de escape!
¡Los vales de myCityHunt son el regalo perfecto para cualquier ocasión! ¡Sorprende a tus amigos y a la familia con este extraordinario regalo! Los vales de myCityHunt tienen una validez de 2 años a partir de la fecha de compra y pueden ser utilizados dentro de este período para una ciudad y un tour de libre elección del portafolio de myCityHunt.
Cupones de regalo