San Ambrosio (Chiesa di Sant'Ambrogio) en Brugherio, Italia, es una joya histórica encantadora que ofrece a los visitantes un viaje en el tiempo, lleno de significado religioso y belleza arquitectónica. Ubicada en el tranquilo paisaje de Brugherio, esta iglesia pintoresca y cautivadora es un excelente destino para quienes desean explorar el rico patrimonio cultural de la región de Lombardía.
Según la tradición oral y literaria, el lugar donde hoy se encuentra San Ambrosio fue en su día una villa propiedad de Ambrosio, el obispo de Milán, en el siglo IV. Esta villa fue donada a su hermana Marcelina y a otras nobles vírgenes que se habían dedicado a una vida de castidad, ofreciéndoles un refugio pacífico para la contemplación y la oración. El propio Ambrosio solía retirarse a este lugar tranquilo para meditar, escribir y difundir la fe cristiana entre las aldeas rurales.
Uno de los aspectos más fascinantes de este sitio es la historia de las reliquias de los Reyes Magos. Se dice que Ambrosio regaló una parte de estas reliquias, que el emperador había dado al obispo Eustorgio, a su hermana Marcelina. Estas reliquias fueron devotamente preservadas a lo largo de los siglos y finalmente redescubiertas por el cardenal Federico Borromeo, quien las trasladó a la iglesia parroquial.
La documentación histórica revela que el complejo, incluido el monasterio, estuvo asociado con varias órdenes religiosas, como los benedictinos, agustinos y finalmente los humillados. Durante el siglo XVI, los humillados se trasladaron al Monasterio de Santa Caterina la Chiusa en Milán, pero mantuvieron la propiedad del monasterio en Brugherio. El sitio probablemente incluía una capilla donde las monjas se retiraban para orar. Esta suposición se ve respaldada por la visita pastoral del cardenal Federico Borromeo en 1596, que describió el estado precario de la arquitectura de la capilla y la riqueza de sus muebles sagrados.
San Ambrosio también aparece en los mapas del Catastro Teresiano de 1763, representado como un edificio a lo largo del camino que conecta con Carugate, ahora conocido como Via dei Mille.
Tras la supresión de las órdenes monásticas por Napoleón Bonaparte, la propiedad, incluida la iglesia, fue vendida a varios terratenientes. En 1886, la iglesia fue restaurada significativamente bajo la propiedad de Ercole Gnecchi. Esta restauración reveló frescos del siglo XIV que representaban a San Ambrosio con sus hermanos Sátiro y Marcelina, así como a los santos mártires Sebastián y Fabián.
El año 1953 marcó un periodo significativo para San Ambrosio. Para conmemorar el 1600 aniversario de la velatio de Marcelina (su consagración a una vida de virginidad), los propietarios de la propiedad, la familia Cavajoni-Bologna, emprendieron una restauración adicional de los frescos de la iglesia y la creación de la luneta en la fachada. Las celebraciones culminaron el 31 de octubre con una visita de Monseñor Ennio Bernasconi, el abad de San Ambrosio en Milán, quien elogió la dedicación a la preservación de la iglesia.
Hoy en día, San Ambrosio sigue siendo un punto focal para iniciativas culturales, como Ville Aperte, que busca redescubrir la belleza de Monza y Brianza. La iglesia y su granja adyacente fueron incluidas en la edición de 2009 de este evento.
El exterior de San Ambrosio, visible desde la Via dei Mille, data de finales del siglo XIX. La restauración de 1886 por Ercole Gnecchi transformó la fachada en una estructura de ladrillo de estilo lombardo. La fachada se divide en dos secciones por una cornisa: la sección superior presenta una luneta con una representación de San Ambrosio bendiciendo, flanqueada por dos ventanas de arco redondo y coronada por un modesto frontón. La sección inferior incluye un portal abocinado con un arquitrabe de estilo paleocristiano, adornado con una cruz griega y símbolos de los evangelistas Marcos (León) y Juan (Águila). Los elementos de diseño se inspiran en la Basílica de San Ambrosio en Milán.
El interior de la iglesia presenta una pequeña nave con un ábside, cubierto por un techo a dos aguas sostenido por vigas de madera decoradas. El suelo está hecho de baldosas de ladrillo, y las paredes están pintadas en un sencillo color pergamino con un zócalo policromado. El altar está precedido por un arco redondo, con un tímpano encima que representa ángeles orando y un óvalo que contiene la cruz radiante Salus Mundi. La bóveda del presbiterio está decorada con segmentos azules estrellados y nervaduras de ladrillo, albergando un altar de piedra debajo. El presbiterio está separado de la nave por una balaustrada de piedra de estilo gótico.
Durante la restauración de 1953, dirigida por el profesor Franco Milani, se descubrieron varios frescos murales del siglo XV. La pared izquierda presenta al Papa San Fabián y a San Sebastián, mientras que la pared derecha representa a los tres hermanos santos: Ambrosio, Marcelina y Sátiro. Los frescos habían sufrido daños por la humedad y las capas de cal aplicadas durante las epidemias por razones de higiene. La restauración implicó la consolidación cuidadosa del yeso y la estabilización de las grietas. Los frescos, caracterizados por esquemas de colores claros, exhiben un efecto decorativo que recuerda al estilo cromático suave del arte lombardo del siglo XV.
En conclusión, San Ambrosio en Brugherio no es solo una iglesia; es un testimonio de siglos de devoción religiosa, expresión artística y significado histórico. Sus paredes y frescos cuentan la historia de un pasado rico y vibrante, convirtiéndola en una visita obligada para cualquiera que explore el patrimonio cultural de Lombardía.
¡Compre sus entradas ahora!
¡Con myCityHunt descubre miles de ciudades de todo el mundo en emocionantes gymkanas, búsquedas del tesoro y juegos de escape!
¡Los vales de myCityHunt son el regalo perfecto para cualquier ocasión! ¡Sorprende a tus amigos y a la familia con este extraordinario regalo! Los vales de myCityHunt tienen una validez de 2 años a partir de la fecha de compra y pueden ser utilizados dentro de este período para una ciudad y un tour de libre elección del portafolio de myCityHunt.
Cupones de regalo